Cómo trabajar en la nube para optimizar los recursos de tu empresa

Trabajar en la nube representa un paso hacia la transformación digital y permite optimizar los recursos, ya que aporta una solución rentable para aumentar su capacidad y funcionalidad. Por eso es algo cada vez más necesario. Pero, ¿qué es exactamente y cómo puede ayudar a tu negocio?

Entendemos por trabajar en la nube, algo también conocido como cloud computing, el uso de la infraestructura de almacenamiento de datos y la capacidad de informatizar los procesos a través de los servicios en línea.

Se trata de una acción qué permite establecer acciones innovadoras, ahorrar costes y conseguir una integración de todos los procesos empresariales. Las ventajas de implementar una estrategia de cloud computing vienen de la mano de transformar los datos en conocimiento, con lo que se crea una fuente de valor incalculable para la empresa.

Ventajas de trabajar en la nube

Trabajar en la nube ofrece muchos beneficios. Permite configurar lo que es esencialmente una oficina virtual y flexible que hace posible conectarse al negocio en cualquier lugar y momento. Y con el creciente número de dispositivos habilitados para la web que se utilizan en el entorno empresarial actual (teléfonos inteligentes, tabletas, etc.), el acceso a los datos es aún más fácil.

Las ventajas de implementar el trabajo en la nube en tu compañía son muchas:

Escalabilidad y capacidad de almacenamiento. En lugar de comprar e instalar costosas actualizaciones, la empresa puede ampliar o reducir su operativa y sus necesidades de almacenamiento cloud rápidamente, según su situación, ya que son flexibles.
Rentabilidad y costes. El ahorro en costes que supone el uso de esta tecnología se podría considerar ya una optimización de los recursos financieros de la empresa. El aumento del rendimiento, gracias a la reducción de los tiempos en los procesos de trabajo, también representa una forma de optimizar los recursos de tu negocio.
Acceso a los datos. Trabajar en la nube facilita el acceso a los sistemas de gestión de la compañía. Los empleados solo tienen que iniciar sesión en sus cuentas para acceder a su correo electrónico, archivos y cualquier otra cosa que necesiten para desarrollar su trabajo.
Ciberseguridad. Ya se trate de una nube pública, un proveedor privado o una solución híbrida, en estos sistemas la seguridad es una prioridad absoluta.

Tipos de sistemas básicos para trabajar en la nube

SaaS (Software as a Service)

Este tipo de servicio ofrece una aplicación de software que administra el proveedor. Normalmente, las aplicaciones SaaS son aplicaciones web o aplicaciones móviles a las que los usuarios pueden acceder a través de un navegador.

Las actualizaciones de software, las correcciones de errores y el mantenimiento general del sistema corren a cargo del usuario, que se conecta a las aplicaciones en la nube a través de un panel de control o API.

Esta forma de trabajar en la nube también elimina la necesidad de tener una aplicación instalada localmente en el ordenador de cada usuario, lo que permite más métodos de acceso en grupo.

IaaS (Infrastructure as a Service)

En este tipo de sistema el proveedor de servicios en la nube administra la infraestructura (los servidores, la red, la virtualización y el almacenamiento de datos reales) a través de una conexión a internet.

El usuario tiene acceso a través de una API o un tablero y, esencialmente, paga por la infraestructura. Este administra cosas como el sistema operativo, las aplicaciones y el middleware; mientras que el proveedor se encarga de cualquier hardware, red, discos duros, almacenamiento de datos y servidores. Además, este último tiene la responsabilidad de ocuparse de la solución de interrupciones, de las reparaciones y de los problemas de hardware.

Este es el modelo de implementación típico de los proveedores de almacenamiento en la nube.

PaaS (Platform as a Service)

Con esta forma de trabajar en la nube, el hardware y la plataforma de software son proporcionados y administrados por un proveedor de servicios externo. El usuario maneja las aplicaciones que se ejecutan en la parte superior de la plataforma y los datos en los que estas se basan.

El PaaS es principalmente para desarrolladores y programadores, y brinda a los usuarios una plataforma en la nube compartida para el desarrollo y la administración de aplicaciones, sin requerir la construcción y el mantenimiento de infraestructura generalmente asociada a estos procesos.

¿Cómo aprovechar la computación en la nube?

Cuando tu empresa trabaja en la nube, gana la capacidad de utilizar las ventajas que aporta la infraestructura cloud para eliminar pérdidas (tanto de recursos físicos como humanos, materiales, de capital y de tiempo). Así como para adoptar decisiones más rápida y eficazmente para transformar los datos en conocimiento. Y puede hacer todo esto sin contar con una mejora sustancial en las condiciones de seguridad.

Como hemos mencionado anteriormente, esta tecnología permite asumir solo el coste relativo a los servicios verdaderamente utilizados. Por ello, es imprescindible no exceder la capacidad necesaria. Así pues, para conseguir los objetivos empresariales, se debe partir de un plan para implementar la estrategia cloud.

Algunas de las preguntas a las que debes responder antes de empezar a trabajar en la nube son las siguientes:

¿Tu empresa necesita monitorizar actividades para conseguir optimizarlas?
¿Necesita definir algunas políticas (por ejemplo, de compras, de clientes, de recursos humanos, etc.)?
¿Requiere almacenar y analizar datos con la máxima seguridad?
¿Qué tipo de informes y documentación tiene que compartir?

El objetivo debe ser simplificar la información, integrarla y poder hacer uso de ella de forma eficiente para conseguir un aumento en el nivel de productividad.

Intentar realizar un proceso de optimización de tal envergadura dejando de lado la nube supondría un fuerte gasto en hardware, software, seguridad y todos los servicios paralelos que lo hacen posible. En consecuencia, tu empresa correría el riesgo de consumir más recursos de los que verdaderamente pretende optimizar y entraría en clara situación de desventaja frente a sus competidores.

La implementación de una estrategia cloud no solo proporciona una mejor gestión y optimización de los recursos de la compañía, sino que representa un sello de calidad. Además, como ves, la digitalización está tomando fuerza, y trabajar en la nube es una necesidad real para no perder la capacidad de competir en un entorno cada vez más cambiante y complejo.