En el mundo industrial recibimos muy a menudo bombardeos de nuevas tecnologías, nuevos procesos y formas de gestionar, pero si analizamos un poco podríamos decir que en la mayoría de los casos como en nuestro sector industrial, primero se realiza un prototipo y después se diseñan los planos, y la fabricación seriada. Así muchas veces ya estamos haciendo hace tiempo lo que un concepto innovador nos quiere transmitir.
Este es el caso de la industria 2.0 puerta de entrada a la 4.0 y prácticamente media definición del IOT, el internet de las cosas. Ante esta definición uno se podría preguntar ¿qué más tengo que hacer?
Realmente muchas veces lo que hay que hacer es reconocer, ver, y sobre todo mejorar la situación actual, porque el éxito está en este punto. Mejorar, por que como decíamos antes no partimos de cero.
¿Es que sin el Internet de las cosas no estaré digitalizado, no habré evolucionado?
El concepto es sencillo, las cosas se conectan a Internet y a través de Internet se pueden comunicar entre ellas. Por ejemplo, tengo una agencia de transporte que tiene personal en mi empresa, está conectada a mi bascula, y cuando termino de preparar un pedido para su expedición ellos se encargan del resto para que la mercancía llegue a su destino.
¿Y cómo es posible? Pues es obvio, un comercial de mi organización ha traído un pedido, digamos que ha convertido una oferta que tenía en su sistema CRM, en pedido en firme. ¿Y cómo lo hizo? Pues a través de los consumos que tiene nuestro cliente fuimos capaces de presentarle una oferta ventajosa para él. ¿Y este nuevo pedido que pasa con él?
Pues nuestro sistema se ha conectado a nuestro SGA, y ha dispuesto de la mercancía. Para ello el almacén motorizado que también está conectado a Internet, y cuando le validamos las propuestas de compra se retroalimenta, emitiendo pedidos a nuestros proveedores, pues el mismo ha preparado el pedido de nuestro cliente, y ha lanzado el expediente interno, que ha creado un albarán, y posteriormente una factura que nuestro sistema EDI, ha remitido a nuestro cliente por Internet.
Y así podríamos seguir haciendo zoom en nuestros procesos y siempre aparecería Internet, pero para poder aplicar bien el concepto en una empresa industrial, necesitamos que nuestro eje central sea un buen ERP, que permita la conexión con otros sistemas si fuera necesario, y con cosas, basculas, almacenes, termómetros, hornos, tornos, fresadoras, localizadores, así bajo el paraguas de nuestro sistema ERP de Gestión podremos trabajar con nuestro Internet de las cosas.
¿Estamos a punto o nos falta todavía ese ERP mediador entre las cosas, procesos y entidades?
¿Cuántas cosas hacemos hoy con Internet?
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